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Facultad de Ciencias sede del análisis de la filosofía de la computación y la inteligencia artificial que reunió a miles, desde Estados Unidos a China

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Facultad de Ciencias sede del análisis de la filosofía de la computación y la inteligencia artificial que reunió a miles, desde Estados Unidos a China

por Susana Paz

Ciudad Universitaria. CdMx.-  Más de 650 participantes presenciales diarios y mil 800 en línea de países como China, Colombia y Estados Unidos, congregó el 2° Simposio de Filosofía de la Computación que se realizó en la Facultad de Ciencias (FC) con el fin diversificar la discusión filosófica sobre la computación, la inteligencia artificial, la tecnología y la innovación.

Organizado por el Grupo de Investigación en Filosofía de la Computación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), encabezado por el doctor Enrique Francisco Soto Astorga, presidente del Comité Organizador del evento, tuvo un ambicioso programa que constó de 10 charlas magistrales, más de 40 presentaciones en paralelo, seis mesas redondas temáticas, un taller inmersivo de tecnoacústica y cibernética y dos conciertos de música renacentista para inaugurar y cerrar el encuentro. 

“El objetivo general ha sido vincular al público asistente con profesionales de la academia e industria que, tanto de manera directa o tangencial, tienen investigaciones filosóficas que están atravesadas por el cómputo: ética de la computación, filosofía de la computación, estética, inteligencia artificial (IA), temas que están en boga en este momento, pero también están anclados a aspectos fundacionales del cómputo como por ejemplo a preguntas sobre qué es una computadora y si las computadoras son objetos de la ciencia natural o no”, expresó el investigador.

El director de la Facultad de Ciencias, Víctor Manuel Velázquez Aguilar, se congratuló de la cantidad de participantes que reunió el simposio y afirmó estar contento de que este encuentro se haya realizado en la Facultad, porque además de reunir a filósofos y científicos de la computación, abre nuevos paradigmas que se tienen que resolver interdisciplinariamente.

“No debemos tener miedo de que va a pasar algo más allá con las computadoras y la IA, yo creo que todavía están a un nivel muy abajo de lo que nosotros estamos pensando... Lo que decía Robert Rosen, sobre que la vida puede ser incomputable, es cierto, estamos aprendiendo nuevas cosas: los sistemas complejos, de alguna manera no podemos conocer resultados precisos de sistemas caóticos que no son predecibles. La vida, el amor, son incomputables, por lo que hay mucho que tenemos que estudiar y trabajar”, dijo el director. 

Este 2° Simposio rindió homenaje al 90 aniversario del natalicio del biólogo y matemático estadounidense Robert Rosen, quien dedicó su trabajo académico a probar que la vida, y en general todos los organismos, no está sujeta a descripciones computacionales.

“Robert Rosen se dedicó a estudiar qué es la vida y rechazar la explicación mecanicista que dice que la vida es un mecanismo, que los organismos somos máquinas. En su libro más importante, Life Itself, llega a la conclusión inesperada para muchas personas, pero no para él, porque lo trabajó por años, que los organismos no son computacionalmente explicables, que no hay una computadora que explique a los organismos, que los organismos no son máquinas”, explicó Soto Astorga.   

Para el profesor de la Facultad de Ciencias el trabajo del doctor Rosen tiene implicaciones directas para la filosofía de computación, porque en primer lugar puede indicar la imposibilidad de poder crear vida artificial in silico, en computadoras.

“Rosen está anclado a las discusiones que tenemos en el curso de Filosofía de la Computación, era imposible no celebrar este aniversario suyo. Nos interesaba rescatar su legado. En dos paneles se abordaron los 40 años de trabajo en la teoría de categorías y sus múltiples aportaciones”.  

Principales ejes temáticos

Los ejes temáticos del programa estuvieron unidos por la transdisciplina y multidisciplina. Uno de ellos fue la vinculación del cómputo con las ciencias de la vida, es decir, se trabajó el tema de la intersección de las máquinas de cómputo y los organismos, las perspectivas de los nexos de la vida y las máquinas. 

El segundo fue la relación de la IA y el capitalismo en términos de acumulación, es decir, cómo es que la IA supone una herramienta de mejora para la producción capitalista y la vinculación entre la mente y la explicación mecanicista de la mente.

Según explicó el presidente del Comité Organizador, este segundo año el punto central de la IA viró a hablar de la relación de la IA en el desarrollo del capitalismo tardío y la acumulación capitalista. 

Otro eje temático fue el de la ciencia cognitiva, computacional y no computacional. Tuvieron una nueva línea que es la Filosofía Política del Cómputo, una disciplina que se está inaugurando recientemente. 

Tuvieron como nuevo eje el de género y computación, el cual trataron de impulsar con mayor fuerza. Para ello la doctora Karla Ramírez Pulido, titular de la Comisión de Equidad de la FC y vicepresidenta del Comité Directivo y Organizador del simposio, coordinó una mesa redonda. 

Tuvieron un eje muy relevante sobre la concepción contemporánea sobre qué es un algoritmo, cómo se puede entender, con un debate muy activo porque no hay una definición central. 

Tecnopolítica, cómputo y capitalismo tardío fue otro tema en el que se abordó cómo el cómputo altera las dinámicas de poder en el capitalismo con paneles de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, quienes participaron en el marco de la conmemoración de los 100 años de aniversario de la instancia. 

Entre las ponencias magistrales, tuvieron la participación de exponentes internacionales con charlas en línea del biólogo teórico y filósofo Michael Levin y la doctora Tania Lombrozo. 

Se tuvo la ponencia magistral sobre el lenguaje y pensamiento del profesor Edward Gibson, reconocido en ese ámbito. La participación del doctor Luis Pineda, quien habló de su perspectiva sobre el cómputo que no necesariamente ancla la máquina de Turing, con una perspectiva novedosa. 

La charla del doctor Valdemar Danry, que habló sobre IA como un tipo de órgano que sirve a la cognición desde el exterior, es decir, como un aumento a la cognición. 

Una charla con el doctor Konrad Körding, que ya había colaborado en el primer simposio. El doctor Simon Charlow, de la Universidad de Yale y que participó de manera presencial. 

También presencialmente estuvo el doctor Salvador Venegas Andraca, del Tecnológico de Monterrey, que además de ser un conocido investigador en computación cuántica recientemente es profesor en la FC justamente del curso de Computación Cuántica. 

El viernes la charla del doctor Alejandro Frank Hoeflich, fundador del Centro de Ciencias de la Complejidad. 

Para cerrar el Simposio se tuvo la charla magistral en línea del doctor Stephen Wolfram, un reconocido investigador en matemáticas y física. 

El programa estuvo conformado además por sesiones plenarias en paralelo a las conferencias magistrales. En esta ocasión abrieron una convocatoria pública para que las personas interesadas se pudieran postular para impartir sus investigaciones.

Planes a futuro: Intersección de política y cómputo

La idea del comité organizador es seguir haciendo anualmente este evento de vinculación al que cambiarán de nombre a Conferencia de Filosofía de la Computación. 

Seguirá siendo gratis y abierto al público. Pero estará planeado con el Primer Congreso de Filosofía de la Computación que será un evento académico de cobro, con convocatoria para resúmenes, con un libro de publicaciones al final, con menos días y sesiones muy nutridas”. 

El investigador Enrique Soto Astorga dio a conocer que el siguiente semestre, por el mes de mayo, tendrán también el primer Workshop Internacional de Sistemas Anticipatorios, que es la teoría que inauguró el doctor Rosen, en el que tienen planeada la visita de su hija Judith Rosen y de investigadores de Estados Unidos, Chile y Portugal, que trabajan sobre la teoría del científico. 

Una colaboración relevante para su grupo de trabajo, es su participación en el 2025 en la organización de los paneles de discusión encaminados a configurar la Primera Ley de Inteligencias Artificiales junto con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). 

Justamente para el científico, la ética en IA es activamente estudiada, pero cuando se introduce la IA en el reino de la filosofía política se vuelve más rica, y eso es algo que está empezando a brotar. 

“Hay un interés por el Estado - nación de legislar las tecnologías, por lo que es importante discutir estos temas para otorgar perspectivas fundamentadas a las personas que van a tomar decisiones sobre el destino de nuestro país”, finalizó Enrique Soto Astorga.